Todos los seres vivos consumen alguna sustancia para su sustento y a raíz de esto producen sustancias de desecho. El sistema excretor se encarga de procesar, almacenar y expulsar del cuerpo estos desechos para asegurar el buen funcionamiento de todos los procesos.
Sin embargo, no todos los poseen posee los mismos órganos y aparatos, por lo que a continuación daremos una explicación sobre el sistema excretor de los insectos.
Los tubos de Malpighi
A diferencia de los animales vertebrados, el sistema excretor de los insectos está conformado principalmente por un solo órgano, los tubos de Malpighi. Estos tubos se encuentran conectados a otras glándulas adheridas al recto, funcionando así como un sistema osmoregulador. Al igual que los intestinos, los tubos de Malpighi se encargan de recolectar los productos residuales para luego expulsarlos a través del tubo digestivo en forma de heces.
Distintos insectos pueden tener estos órganos en diferentes cantidades, desde las dos unidades como en el caso de la mosca de fruta, hasta llegar alrededor de los 200 como en el caso de la langosta del desierto, aunque lo normal suelen ser las 6 unidades. Al hablar de su apariencia se pueden describir como unos tubos muy finos, largos, enrollados y ciegos, con un interior cubierto de microvellosidades que se encargan de extraer los nutrientes.
Importancia del sistema excretor de los insectos
Los insectos, al igual que todos los demás seres vivos, necesitan una forma de expulsar de sus cuerpos todos los materiales residuales que sobran al terminar procesos como la digestión. Es aquí donde entra el sistema excretor de los insectos.
Principalmente, este sistema en los insectos tiene como objetivo eliminar los desechos como el ácido úrico y el amoníaco, pero también se encarga de controlar el balance hídrico de sus cuerpos, por lo que se reabsorben agua, iones, azúcares y aminoácidos de los últimos desechos para reponer los recursos perdidos durante el proceso de la digestión, los cuales pueden variar según el medio ambiente del insecto.
Sistemas criptonefríticos
El sistema excretor de los insectos como larvas, escarabajos y orugas de mariposas; que viven en ambientes especialmente secos posee una función adicional que les permite conservar y recuperar la mayor cantidad de agua posible, la cual no obtienen a través de los alimentos.
Se trata de un reposicionamiento de la zona ciega de los tubos de Malpighi con el epíteto rectal, acortando la distancia que hay entre ellos, lo cual permite el paso de agua hacia la hemolinfa, pero sin permitir el paso hacia el epitelio tubular.
Esto les permite a estos insectos crear una bomba osmótica que los ayuda a extraer agua directamente del aire que rodea sus rectos, dándoles la oportunidad de recobrar y conservar.
El sistema excretor de los insectos es uno de los más complejos e interesantes del reino animal, incluyendo órganos diminutos y altamente complejos, pudiendo estar comprendidos entre las bajas unidades y llegando hasta los centenares.
Inclusive, es capaz de ofrecer ciertas características que mejoran las capacidades de nutrición de los insectos además de solo expulsar los materiales de desecho.
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